martes, 17 de marzo de 2020

Hope

¡Mira! Parece que dejó de llover

A donde veo, lo único que resalta es el temor, ojos que miran el suelo desde sus casas, ojos que sólo ven y comparten noticias acerca del temor social con respecto de este virus que nos asedia, que nos a sitiado.
Pero lo que veo en mi propio espejo es el desequilibrio, la fragilidad de la especie que culmina la cadena alimenticia, y que es el último eslabón de la evolución de este milagro químico, que reta segundo a segundo al mayor aniquilador, entropia, la pieza minima de complejidad llamada covid-19 nos ha golpeado donde no teniamos defensas sinemargo con todo esto, el panorama es diverso... Pero, en algun rincón de estas casas ahora pobladas de gente que despega sus ojos de horarios apretados y responsabilidades ilusas, estas personas, quiza hoy puedan conversar, convivir, hoy estan más cerca, más humanos hora tras hora.
El planeta se da un respiro  ya que las empresas ahora desoladas dejan de emitir sus humos pesados y asfixiantes, los vehiculos ahora duermen en camas frias, las industrias por fin detienen el imparable progreso y por un momento estos consecutovos golpes muestran un lado no tan malvado, escondido en lo profundo, casi invisible, esperanza... Hoy el punto azul pálido del voyaguer II se ve un poco más azul...

jueves, 5 de marzo de 2020

La vida

I.

SON PASOS PEQUEÑOS los que damos cuando no sabemos  a donde ir, o tenemos miedo...

Cuando abrí los ojos por primera vez, pocos podrán creerme, pero lo que ví lo recuerdo con claridad, y no fue como hoy veo las cosas, mis sentidos tan jóvenes estaban algo confundidos, todos ellos ahora sentían y me describian cosas distintas, sonidos mezclados con imágenes mezclados con sensaciones táctiles, calor y frío al mismo tiempo Todo esto tan nuevo y brillante, que me dio un pequeño aire de lo que es estar vivo en realidad.
Al nacer lloré, lloré con fuerza, el frío aire del ambiente me hizo doler al entrar en mis pulmones, luego descubriría que llorar no solo expresa dolor o angustia, lo supe cuando vi a mi madre, que habiendo parído con dolor, no lloró sino hasta que me tuvo en sus brazos, también aprendí cuando vi la mano de mi padre sujetando a mi madre lo que era amor del bueno... Así, entonces descubrí que llorar era la forma natural de llegar a a este mundo, sin una sola prenda o propiedad, sin nada más que la fuerza vital que te inunda y te hace llorar  pero también te hace avanzar, y te obliga a pararte cuando te caes, a intentarlo cuando no puedes más, a seguir....
No había olvidado ese día, hasta que crecí y el mundo me inundó con otro tipo de conocimiento, entonces lo olvidé. Ese día aprendí más de lo que había aprendido jamás, ahora sólo lo recuerdo cuando sueño...

Aunque pierdas de vista lo importante, alguien habrá que te lo recuerde...

jueves, 13 de febrero de 2020

San Valentín

El mito de un 14 de febrero basado en el romanticismo poético y el amor romántico, ahora claro esta, corrompido por marcas intentando a toda costa vender; es ya un hijo descarreado, que perdido del camino llano es topa con los intentos mediocres de un sociedad egoísta, de imitar lo que en algún momento se concidero romántico. Este viejo San Valentín se levantaría de la sacra tumba, juntaria a un par de los casados  por él bajo su manto y levantaría las armas para recuperar los valores de esta idea transmutada en el tiempo que se tiene del amor.
Una de las historias que rodean a esta palabra tan difícil de encajar en una definición que se ajuste a las observaciones atemporales, es esta leyenda proveniente de la mitología griega que pone al amor y a la locura como niños jóvenes entusiasmados, jugando  en una persecución llena de risas y gritos animados, que termina por un accidental arrebato de locura, causando un accidente a amor y cegandolo por completo para toda la eternidad, así, estos amigos de juego, pasaron a ser partes contrarias de un juicio librado por los dioses adultos en los que despues de ver el llanto de amor desconsolado y la locura desatada en abundantes disculpas justificadas en su propia naturaleza incontrolable, termina en un indiscutible veredicto, cuya disposición dicta que locura cual lazarillo, ha de guiar el camino de amor y no se podría separar de él para siempre. Entonces ya viene a nosotros la idea de que el amor siempre viene acompañado de locura justificados como actos de amor....

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